La vida de un arreglador de caballos chilenos es y será siempre de mucha responsabilidad y constancia, de iniciar muy temprano su jornada y sacarle el máximo de provecho al día de trabajo, por eso es que en este tiempo de pandemia por el Covid 19, quienes realizan esta labor y tienen la suerte de estar trabajando, así lo hacen.
Es el caso del arreglador Miguel Parra Paredes, que está cumpliendo su tercera temporada en el Criadero El Relincho, de Johnnson Guiñez, que nos conversa al respecto:
´´Estoy cumpliendo mi tercera temporada en El Relincho, me siento muy cómodo porque es un trabajo de amigos, todo se hace muy llevadero´´.
Respecto al tiempo que llevan suspendidas las actividades corraleras, expresa:
´´Se echa mucho de menos correr la vaca, uno trabaja para eso y es ahí donde uno muestra el trabajo que realiza, estar mucho tiempo sin correr, sin mostrar algo, se complica la cosa, la verdad es que se extraña mucho´´.
En relación a como ha utilizado el tiempo en esta época de pandemia, responde:
´´Afortunadamente en el criadero hay mucha caballada nueva, hay harta pega, así es que la hemos avanzado bastante, debo agradecer a Dios que no ha faltado el trabajo, porque
en otros lados está muy difícil la cosa, y ese debe a la poca cantidad de ejemplares que tienen y sin rodeos es poco lo que pueden hacer, nosotros , reitero, tenemos bastante caballada en trabajo, por eso estamos tranquilos´´.
También nos conversa acerca del trabajo que se ha realizado con la collera que tienen clasificada junto a Fernando Guiñez:
´´El trabajo que se ha realizado con los potros Repunte y Bodeguero, ha sido intermitente, eso debido a que han dado fechas para el Nacional, luego se suspende y hay que pararlos,
Pero se han corrido en la casa y se han visto bien, luego se baja la intensidad, los andamos y trotamos para mantenerlos, ahora nuevamente están parados hasta cuando avisen, pero el descanso les hace bien, por ello es que todo el trabajo está volcado en los productos nuevos´´.
Finalmente nos cuenta respecto al cuidado tenido por la pandemia:
´´Ha sido rigurosa, por nuestros colegas de trabajo y muy en especial por nuestras familias, somos pocos los que trabajamos en el Criadero, nos preocupamos al máximo de no contagiarnos, gracias a Dios nos hemos cuidado bien y no ha pasado nada, tenemos que seguir cuidándonos y esperar el tiempo que sea necesario para volver al rodeo´´
